Aunque el afan mercantilista siempre está presente en las celebraciones del mundo occidental, hay que entrever el verdadero espíritu de lo que representa cada acontecimiento. En este contexto, el día de las madres que se celebra en nuestro país cada diez de Mayo debe significar nuestra entrega y nuestro respeto por aquella mujer que nos dio la vida, pero no sólo este día sino cada día de nuestra vida.
Sin embargo, tradicionalmente algunos hijos hemos adoptado un estilo de celebrar a nuestras mamás donde sólo cumplimos con llevarle un obsequio o sacarla a algún restaurante ( a las que mejor les va), o asistimos a una comida donde la propia mamá cocina para el festejo.
Si nos conducimos así estaremos metalizando y por lo tanto minando el agradecimiento y amor que debemos a la madre que da todo hasta su vida por nosotros.
¿No sería mejor que todo el año fueramos hijos obedientes, atentos a los sabios consejos de mamá que sólo desea lo mejor para nosotros? ¿No sería mejor que estuviéramos al pendiente de cómo se siente y cuáles son sus anhelos y esperanzas? ¿No sería mejor que le ayudáramos en sus quehaceres domésticos? ¿No sería mejor que mejoráramos nuestra conducta para no causarle pesares? ...
...¿No sería mejor?........ Tú conoces a tu mamá y sabes lo que ella espera de tí; ojalá que este diez de Mayo y todos los días pienses verdaderamente en tu mamá y con tus actos le demuestres que es el ser que se merece toda tu gratitud por haberle dicho sí a la vida y por haberse sacrificado por tí a cada momento.
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