martes, 3 de enero de 2012

En México y los países de Occidente, concebimos que cada año nuevo comienza el día 1 de enero y culmina el 31 de diciembre, contando así con 365 días, en doce meses. Por ello la víspera de este día significa una celebración de gran relevancia y múltiples significados.

El culminar un año más puede hacernos sentir contentos , llenos de esperanza en el futuro; aunque también habrá familias que no verán finalizar juntas este año que recién comienza, habrá hermanos que sean más pobres, hermanos que cansados de luchar pongan término a su vida. 

Por eso es que dentro de nuestros propósitos de año nuevo no podemos olvidarnos de los que más sufren, y hacer realidad nuestra creencia en el Evangelio participando e interesándonos en los demás desde los diferentes ámbitos de nuestra vida.

El papa nos pide entre otras cosas para este año 2012, transmitir a los jóvenes el aprecio por el valor positivo de la vida, suscitando en ellos el deseo de gastarla al servicio del bien. Éste es un deber en el que todos estamos comprometidos en primera persona.

En nuestra comunidad de Vicente Guerrero esforcémonos por ser cada vez más hermanos, que juntos trabajemos en concordia en pro del hermano que sufre y que necesita una ayuda caritativa. 

En síntesis reflejemos el rostro misericordioso del Padre que nos ama y que nos habla por medio del Verbo encarnado: Jesucristo.
Saludos



Entérate de lo nuevo:

Reflexión dominical del Párroco 1 de Enero de 2012                                                  

No hay comentarios:

Publicar un comentario