¿ME QUIERO O NO ME QUIERO?

En esta sociedad tan cambiante en la que vivimos, se nos bombardea con continuos mensajes acerca de las transformaciones que requerimos para estar más saludables, ser mejores y tener más; sin embargo, a pesar de que se habla de temas antes mitificados, se abordan cada vez menos las emociones y el hacer el bien común hacia los demás.

Pero ¿cómo hacer el bien a otros cuando no hay respeto para sí mismo?, ¿cómo hablar de lo que sentimos si no lo aceptamos por temor a no encajar en la “moda”?, ¿cómo quererse y respetarse cuando los valores están sumergidos en el egoísmo y en las diversas ocupaciones que absorben nuestro tiempo?

La mayoría conoce que el autoestima es valorarse así mismo, quererse, respetarse o darse valía en todos los aspectos de la vida; pero, ¿estás segur@ de que tu autoestima está en buen estado? Te ponemos 3 afirmaciones invitándote a contestarlas con falso o verdadero de acuerdo a cómo te sientes.

 

* Me siento satisfech@ con mi estado de salud y mi apariencia física.

* Soy de humor alegre, capaz de controlar mi estrés y agrado a las personas que me rodean.

* Las críticas que me realizan en diferentes aspectos de mi vida las tomo con tranquilidad para aprender de mis errores.

 

¿A cuántas afirmaciones contestaste falso? Aunque estas frases son muy breves, son para que puedas darte una idea de que es necesario mantenerte en crecimiento mejorando tus habilidades, actitudes, capacidades y, sobre todo, incrementar la aplicación de valores humanos y cristianos para que en este mes del amor y la amistad se celebre el amor en todo su esplendor. Demuéstrales a los que te rodean que tu amor por ti y por ellos va más allá de regalos, globos y chocolates.

¡Felicidades en el amor de Cristo!